Ciudad de México, México. Un alucinante viaje de fantasía y rock entregó Liquits en el Teatro Metropólitan este 24 de abril, significando su retorno a los escenarios luego de seis años de receso.
Desde los primeros acordes el reencuentro con sus seguidores fue de una entrega poderosa, en conexión instantánea con sus integrantes: Teo, Edi Kistler y Ro Velázquez, dirigiendo “Pura lira”, “Freaky Nasty Boy” y “Naves de corto alcance”.
La producción fue diseñada en arte digital, escenografías coloridas y personajes fantásticos, muy a su estilo desde sus orígenes hacia 1993. Los reunidos disfrutaron de la travesía escuchándose “Kurasaibo”, “Patito de Hule”, “Chido” y “Pachanguero”.
Al repertorio se sumó “Déja Vu”, “Llórale guey”, “Anoche” y “Cinco vueltas al sol”. Sorprendido por la candente recepción, el buen Ro saludó a los presentes:
“¡Hay hasta tres generaciones por ahí, qué chingón! ¡De verdad mil gracias!”.
El clamor generalizado retumbó hasta el último rincón, reuniendo un público diverso generacional, desde los fieles coetáneos a la banda, familias con sus pequeños hijos y oleadas juveniles, coreando cada una de las rolas incluyendo “Recuerdo de verano”, “Cuando apagues la luz”, “Transexy”, “Ven ven”, “¿Quién eres?” y “Te comes lo que dices”.
El extenso set adicionó “Cabeza de limón” y “Jardín”, avanzando en “Chicharos mágicos”, “Samprul” y “Sola”. El ocaso se avizoró afinando “Tu sonrisa”, “La vida es corta” y “Desde que”. El finiquito fue firmado con el “Oso carpintero”.
Los Liquits en reverencias gratitudes fueron cobijados en marejadas de aplausos y griteríos ensordecedores, aclamándoles de satisfacción por el esperado reencuentro.
Crédito Fotos: Liliana Estrada / Ocesa.
